Nuevas pautas en política para el desarrollo

Desde la posesión del ministro Dirk Niebel, del Partido Liberal Democrático (FDP), a finales de octubre de 2009, variaron los intereses de la política alemana al desarrollo. Niebel ha generado controversia desde anunciara el fin apoyo monetario a China. Y las discusiones sobre su propósito de entrelazar aún más el compromiso humanitario con el militar, sobre todo en Afganistán. Entretanto, muchos especulan que Niebel haya desistido de alcanzar la meta de aumentar a 0,7 por ciento el aporte de ayuda al desarrollo del Producto Interno Bruto (BIP) hasta el año 2015, propuesta por los países más industrializados. Por último, el ministro anunció reformas en la cooperación técnica.

Más dinero y más eficacia

Por naturaleza, un ministro de desarrollo viaja mucho. Y esto se aplica más para un novato en el cargo como Dirk Niebel. En enero pasado visitó varios países africanos y en marzo Vietnam y Cambodia. De esta forma conoció seguramente un poco más las regiones relevantes de su nuevo campo de acción. Durante su segundo viaje surgieron dudas en Alemania sobre si el Gobierno Federal cumplirá con el compromiso de aumentar el presupuesto del ministerio de Desarrollo del actual 0,4 por ciento del PIB al 0,7.

Las dudas las generó el mismo Niebel. El objetivo, según lo dicho por el ministro, es “hacer algo razonable con tanta cantidad de dinero”. Para alimentar más la discusión, el político aludió a la radio alemana que “independientemente de alcanzar o no la meta, la pregunta determinante es la efectividad de nuestro compromiso. "Alemania puede desembolsar todavía mucho dinero, pero si no obtenemos ningún resultado visible, no servirá de nada, así se alcance una cuota”, advirtió.

Dinero si, ¿pero para qué?

Políticos especialistas en desarrollo de otros partidos han llamado la atención sobre el abandono de la meta del 0,7 por ciento. Thilo Hoppe del partido de los Verdes, y ex presidente de la Comisión de política al desarrollo del Bundestag, dijo a Deutsche Welle que “obviamente Alemania necesita una política al desarrollo efectiva e inteligente, con la cual no se pierda dinero”. Pero para Hoppe también se requieren altos montos de dinero, con los que en muchos lugares con la compra de medicamentos se pueden salvar muchas vidas. “ Si Alemania decide que el volumen no es tan importante y que de pronto no se alcanza la meta del 0,7 por ciento, entonces entra en una grave contradicción”, replica Hoppe.

Las cifras actuales muestran qué tan difícil es alcanzar dicha meta. Alemania no logró un objetivo intermedio. Para 2010 ya se planearon 0,51 por ciento de ayuda al desarrollo, equivalentes a unos 250 millones de euros. Aún así, la promesa del anterior gobierno de social-demócratas (SPD) y conservadores (CDU/CSU), de incrementar la ayuda hasta un monto de 6 mil millones de euros, no se va a cumplir.

De acuerdo con la visión del actual ministerio de Cooperación al Desarrollo, Alemania cumplirá con su palabra. Por su parte, Sabine Brickenkamp, vocera del mismo ministerio, piensa que teniendo en cuenta la crisis económica y financiera éste "es un aumento enorme, lo que afianza más la posición de Alemania".

Reforma de cooperación técnica en veremos

En los titulares de la prensa germana se divulga además la preocupación por el anuncio de la reforma de las organizaciones ejecutoras de la política alemana para el desarrollo, de la cual son responsables, sobre todo, la Cooperación Técnica Alemana (GTZ), el Servicio Alemán de Cooperación Social Técnica (DED) e “Inwent”, organización dedicada a la formación de adultos que prestan servicios en otros países. Las tres deben unir sus fuerzas para presentarle al ministro Niebel un modelo antes del receso parlamentario de verano.

En un proyecto parecido fracasó su antecesora, la social-demócrata Heidemarie Wieczorek-Zeul. No obstante, Niebel parece tener más éxito en esta ocasión. Las organizaciones afectadas se han mostrado cooperativas y comparten, al parecer, los objetivos de la reforma, que resumió la vocera del ministerio Brickenkamp en Berlín: “Así se espera que Alemania sea más efectiva y uniforme en el extranjero y se entienda más nuestra presencia en los países socios".

Con la reforma planeada para la cooperación técnica el ministro Niebel cambiaría un proyecto que fue acordado con los partidos CDU/CSU de la presente coalición. Todavía no es claro si más adelante se fusionará al Instituto de Crédito para la Reconstrucción (KfW). Esta combinación llamó la atención de peritos y de la Auditoría Federal, que investiga si el dinero de los impuestos fue utilizado responsablemente. Por el momento, sin embargo, se trataría solamente de una reestructuración de la cooperación técnica.

¿Orientación económica?

Lo que Niebel ve como una ventaja lo analizan críticos con preocupación. Para ellos la nueva política alemana para el desarrollo, bajo esta nueva dirección, está muy orientada a lo económico y a lo militar. La respuesta de Niebel a esta objeción se centra en que no tiene miedo al contacto con el ejército, y que obviamente él, como ministro para la Cooperación Económica y el Desarrollo, representa también los intereses de la economía alemana.

Autor: Marcel Fürstenau /CMW

Editor: José Ospina-Valencia