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Honduras sigue en la encrucijada

29 de agosto de 2009

Ninguna propuesta para solucionar crisis tras el derrocamiento del presidente Manuel Zelaya ha dado fruto. La inflexibilidad de las partes es el mayor obstáculo.Grupo América Latina de la UE debatirá el caso en Bruselas.

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Roberto Micheletti, presidente del Congreso y presidente de facto de Honduras.Imagen: AP

En Honduras el tiempo apremia. El inicio de la campaña electoral en el país centroamericano debe empezar este 1° de septiembre, y la ya de por sí complicada situación política amenaza con enredarse aún más, sin que por el momento haya una voz contundente que diga claramente si se actuará de manera unificada frente al candidato elegido si no se resuelve la crisis antes de los comicios de noviembre.

Ni la condena internacional al golpe, ni el recorte de las ayudas financieras o el cada vez mayor aislamiento político han movido al gobierno de facto de Roberto Micheletti. Su rotunda negativa a permitir el retorno a la presidencia a Zelaya sigue siendo el principal impedimento para que se firme el Acuerdo de San José propuesto por el presidente costarricense, Oscar Arias, hace ya más de un mes como solución a la crisis.

OEA: más débil que nunca

La delegación de cancilleres de la Organización de Estados Americanos (OEA) encabezada por su secretario general, José Miguel Insulza, que viajó esta semana a Tegucigalpa para tratar de convencerlo para que lo suscriba, regresó con las manos vacías.

Insulza empero, afirmó que "todavía hay un clima para buscar algunos últimos esfuerzos", si bien reconoció que el margen es cada vez "más estrecho". El último esfuerzo diplomático -de la larga lista, hasta ahora infructuosa- tendrá como escenario la semana próxima, una vez más, a Washington, hacia donde se han dirigido los principales actores del conflicto.

Zelaya viajará a la capital estadounidense, donde el martes asistirá a un Consejo Permanente especial de la OEA para tratar el tema hondureño, en el mismo día en que en el país centroamericano comienza la campaña electoral.

¿Eleva Washington la presión?

Fuentes oficiales hondureñas en Washington consultadas por la agencia alemana de noticias dpa descartaron por el momento un encuentro de Zelaya con autoridades estadounidenses más allá de la OEA. Sin embargo, se espera que el Departamento de Estado aproveche la ocasión para decretar medidas más duras contra Tegucigalpa, después de que esta semana ordenara la suspensión temporal de visados no urgentes en Honduras.

Fuentes del Departamento de Estado adelantaron que finalmente se podría calificar los sucesos del 28 de junio como un "golpe militar" en vez de “golpe de Estado”, tal como lo ha venido definiendo hasta ahora.

El matiz reviste gran importancia legal, puesto que, de pasar a la calificación de "golpe militar", Washington estará en disposición de suspender todas las ayudas económicas a Honduras y no sólo las directas al gobierno y al Ejército que ya ha realizado. ntre los fondos a cortar figurarían los de la Cuenta Reto del Milenio, que tiene un programa quinquenal hasta 2010 por 215 millones de dólares de los que unos 135 están aún por aprobar y que serían inmediatamente suspendidos.

¿Sin alternativa a plan Arias?

De este modo Washington espera mover a Tegucigalpa hacia la firma del Acuerdo de San José que, como ha reiterado insistentemente en los últimos días el Departamento de Estado, sigue siendo considerado "el proceso adecuado para resolver la situación".

También Insulza le reiteró a una delegación de Micheletti en Washington que “no hay alternativa al plan Arias”, en vista de que el Gobierno de facto está tratando de impulsar de nuevo la vía de la "tercería", ya propuesta en los inicios de la crisis que implica un compromiso de que una tercera persona, y que prevé que ni Zelaya ni Micheletti, asuma la presidencia hasta que concluya el actual mandato en enero.

Reunión del Grupo de América Latina de Unión Europea

Otro intento de presión podría provenir de Europa, donde la primera semana de septiembre se reunirá el Grupo de América Latina de la Unión Europea. Según adelantó el ministro de Exteriores español, Miguel Ángel Moratinos, en el encuentro se estudiarán "medidas excepcionales que manden una señal para que las autoridades hondureñas de facto comprendan que en el siglo XXI no se pueden aceptar golpes militares".

Pero la interrogante central queda: ¿Se logrará un consenso que saque al pueblo hondureño del callejón sin salida?

Autor: JOV / dpa/ ap

Editor: Pablo Kummetz