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De Hamburgo a Vegeburgo

Claudia Herrera Pahl5 de julio de 2003

La lucha en pro de los derechos de los animales comienza por cambiarle el nombre a la ciudad puerto de Hamburgo. Extraño, pero algunos activistas parecen pensarlo así.

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¡Hmm, que deliciosa vegeburgesa!Imagen: AP

Puesto que les molesta la asociación del nombre de la ciudad de Hamburgo con las hamburguesas, quisieran rebautizar la ciudad puerto alemana con el nombre de Vegeburgo. Para alcanzar esta meta están incluso dispuestos a pagar 10.000 euros a las autoridades de la ciudad. Según la organización "Gente por el Tratamiento Ético de los Animales" (PETA por sus siglas en inglés) el nombre de Hamburgo evoca imágenes de "montones de carne de res poco saludable de ganado muerto y pulverizado".

Una hamburguesa no es un BigMac

Hamburgo podría promover el bienestar y la simpatía por los animales rebautizándose con el nombre de Vegeburgo, según la organización PETA. Una lógica difícil de comprender, o usted cree que las miles de personas que día a día se comen un "suculento" Big Mac, sentirán más simpatía por una res si se le cambia el nombre a Hamburgo?

Además, la hamburguesa que según PETA es responsable de que millones de personas enfermen cada año de males fatales como problemas cardíacos, cáncer, apoplejías y diabetes, con seguridad no tiene nada que ver con la original hamburguesa de Hamburgo, sino con una mala alimentación.

Según historiadores los orígenes de las hamburguesas -mencionadas por primera vez en un menú de un restaurante neoyorquino en 1834- se encuentran en un sandwich de carne vacuna que en su tiempo fue un tentempié muy popular entre los marineros de Hamburgo. Es de pensarse que este antiguo sandwich e tan antiguo como la segunda ciudad en tamaño de Alemania que tiene sus raíces en el siglo IX. Por cierto que su nombre proviene de las viejas palabras sajonas "Ham" que significa bahía y "Burg" fortaleza.

Hamburger Hafen
El puerto de Hamburgo.Imagen: AP

La fortaleza en la bahía

Puesto que su principal tarea es cuidar de su fortaleza, el alcalde de Hamburgo, Ole von Beust, rechazó la oferta de PETA, como lo hiciera meses antes la ciudad estadounidense de Hamburgo en Nueva York.

La organización PETA, que dice tener 750.000 miembros en todo el mundo, tal vez debería reformular su demanda. ¿Qué tal si pide no el cambio del nombre de Hamburgo sino el de la hamburguesa? Si propusiera que se le llamara vegeburguesa tal vez las personas incluso optarían por comer más vegetales.