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Crece presión sobre Ulrich para que confiese presunto dopaje

jov / Agencias24 de mayo de 2007

Media docena de sus antiguos compañeros de equipo confesaron haberse dopado, pero el ex capitán del conjunto alemán Telekom Jan Ullrich sigue en silencio. El mayor escándalo de dopaje en el ciclismo alemán se agrava.

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Jan Ullrich salva el Paso de Gottard en los Alpes.Imagen: AP

Aunque el ex ciclista profesional, bajo sospecha de doping, adoptó este jueves 24 de mayo una sorprendente decisión: Peter-Michael Diestel dejó de ser, con efecto inmediato, abogado del ganador del Tour de France 1997.

'Hemos prescindido de Diestel. Ya no está autorizado a hablar en nuestro nombre', anunció el manager de Ullrich, Wolfgang Strohband, a través del periódico amarillista Bild, que publica hoy sus declaraciones. Por su parte, Diestel dio otra versión: 'Renuncié a mi cargo'.

Confesiones de ex colegas preocupan a Ulrich

Diestel dijo en la ZDF, la segunda cadena televisiva nacional, que las recientes confesiones de antiguos compañeros de Ullrich le dieron que pensar y despertaron graves temores. 'Ahora, lo que mi representado sabía entonces y lo que había tomado hay que valorarlo de modo muy distinto, desde mi punto de vista', subrayó Diestel. Hasta ahora Ullrich negó siempre haber tomado sustancias prohibidas para aumentar su rendimiento.

El abogado justificó el persistente silencio de su antiguo representado en las posibles consecuencias penales y que por eso, no revelaba nada. 'Cuando otros opinan que tienen que admitir algo ahora, entonces ése es el camino adecuado y lógico para declarar la guerra al doping en su totalidad', dijo Diestel. Pero Ullrich es de otra opinión. 'Se halla en una situación diferente a la de (Bert) Dietz, (Christian) Henn y otros muchos, porque él, en su calidad de figura líder del ciclismo alemán, esta amenazado por varios procesos'.

Tormenta en Bonn

La Fiscalía de Bonn está examinando ahora si la demanda por estafa a T-Mobile presentada contra Ullrich en 2006 por la catedrática de Derecho Britta Bannenberg puede ser aceptada o no.'Hasta ahora hemos partido siempre de la base de que el equipo T-Mobile no sabía nada del doping. Ahora habrá que ver si puede seguirse pensando así', dijo un portavoz de la Fiscalía.

Ullrich, de 33 años, reiteró al anunciar su retirada del ciclismo activo el 26 de febrero que nunca había engañado. T-Mobile despidió con efecto inmediato en junio de 2006 al campeón olímpico de Sydney 2000 tras verse salpicado por el escándalo de doping en torno al médico español Eufemiano Fuentes.

Convocatoria a no pensar sólo en récords

Diestel abogó por una reunión conjunta de deportistas de alto nivel, tanto de acusados como de afectados, a la que deberían asistir también entrenadores condenados. Es indispensable un cambio de mentalidad en todo el deporte alemán, opinó Diestel. 'Debemos comprender que no se pueden escalar los Pirineos a cuarenta por hora ni levantar 250 kilos sin estimulantes. Nos tenemos que despedir de pensar en récords'.

Hoy en día no parece posible un deporte de alto rendimiento sin medios estimulantes. 'Lo digo yo, lo dicen todos los entrenadores, lo saben todos los que trabajan en la política de deporte y lo saben también todos los directivos', señaló.

No escampa ni en Europa ni en Estados Unidos

En los mismos instantes y al otro lado del Atlántico, concluía una audiencia de arbitraje contra Floyd Landis, sindicado de haber ganado la edición 2006 del Tour de Francia gracias al dopaje. Una audiencia que concluyó con más interrogantes que respuestas después de nueve días de testimonios en una sala de la Universidad de Pipperdine.

A la espera de saber cual será la decisión final de los tres jueces independientes que darán su veredicto sobre el caso, las audiencias y los testimonios dejaron más de una sorpresa, drama y sobre todo más cuestionado que nunca la figura de Landis.

El abogado principal de Landis, Maurice Suh, fue categórico cuando dijo a los tres jueces que las pruebas del laboratorio francés practicadas a Landis no eran más que 'basura'.