Ideologías del odio
16 de febrero de 2007
¿Puede haber un castigo justo?
WESTFALENPOST, de Hagen, Alemania: “El 11 de marzo de 2004 es el triste día en que el terror alcanzó a Europa. Muerte, sufrimiento y horror en Madrid y luego en Londres. Este juicio es para España y toda Europa tan importante que ya está considerado un “proceso del siglo”. Es un juicio que despierta pesadillas. Y plantea la pregunta: ¿puede haber un castigo justo para terroristas que tanto dolor y miedo provocaron? La fiscalía exige para cada uno de los principales acusados casi 40.000 años de cárcel. Una cifra extraña. Las dimensiones de la condena exigida dicen mucho acerca de cuán impotente es la Justicia para hallar una respuesta realmente adecuada al terror global”.
Ausencia de arrepentimiento
SVENSKA DAGBLADET, Estocolmo: «Lo que en Madrid comenzó como un día normal el 11 de marzo de 2004, se transformó pronto en todo lo contrario, cuando terroristas islamistas hicieron volar por los aires cuatro trenes. Asesinados fueron 191 seres humanos y más de 1700, heridos. El recuerdo permanecerá para siempre. Ahora acaba de comenzar el juicio contra 29 personas, entre supuestos autores y sus asistentes. Lo que más llama la atención en el caso de terroristas condenados anteriormente es la ausencia de arrepentimiento y sentimientos de culpa. El fundamentalismo religioso como base del terrorismo islámico se basa en que todo ser humano que no comparta la pureza de la fe es visto como un enemigo y un ser humano de menos valor. En ello se constata una similitud con el comunismo y el fascismo, las ideologías de odio del siglo XX.
Conmueve a España
DIE WELT, de Berlín: “En este caso no fue Al Qaeda quien actuó, sino grupos terroristas “autónomos”, inspirados por Al Qaeda. Ayer comenzó el juicio contra 29 sospechosos. Conmueve a España nuevamente, por la monstruosidad del hecho. Por ello es bueno que sea transmitido por televisión. Pues así se ve claramente lo que las sociedad abiertas olvidan fácilmente, y por buenas razones: que están realmente amenazadas y que la guerra no tiene lugar en algún lugar muy lejos de aquí”.