Cumbre Iberoamericana: proyección y metas concretas

Con el lema "Realidad Socioeconómica de la Comunidad Iberoamericana y sus retos: hacia una Agenda Iberoamericana", la Cumbre de Salamanca pretende devolverle el impulso con el cual esta reunión anual empezó en 1991 por iniciativa de España y México.

En años recientes este foro fue dejando de interesar a los mandatarios latinoamericanos, tanto por estar implicados en sus propios procesos de integración, como por la imposición de temas y el liderazgo unilateral de la administración Aznar.

Novedades

En Salamanca se presentó oficialmente la Secretaría General Iberoamericana (SEGIB) que dirigirá el uruguayo Enrique Iglesias, ex presidente del Banco Interamericano de Desarrollo (BID).

España pretende que los debates puedan "incidir en los problemas reales" de los 570 millones de ciudadanos iberoamericanos. El gobierno español quiere que Salamanca sea "el punto de arranque de una nueva y fecunda etapa en el proceso de cumbres, tanto en sus formas como en sus contenidos", afirmó su anfitrión, José Luis Rodríguez Zapatero, presidente del Gobierno español.

Proyección internacional

Iglesias declaró que "los esfuerzos que nuestros países realicen en el marco del espacio iberoamericano pueden traducirse en resultados prácticos para nuestros pueblos, y también para la comunidad internacional, porque servirán para afianzar la paz, la seguridad y el desarrollo en el mundo".

En su opinión, el proceso de las Cumbres Iberoamericanas forma parte de un movimiento general en el mundo de los países por acercarse a sus vecinos para "navegar mejor en esta nueva y más intensa globalización".

En este sentido, el rey Juan Carlos I pidió en la inauguración de la Cumbre Iberoamericana que la región Iberoamericana desempeñe un papel de mayor importancia en el escenario internacional. "Por su dimensión y potencial político, económico, social y cultural, Iberoamérica puede y debe desempeñar un papel más relevante en el mundo actual", dijo el monarca.

Stan en la agenda

En Salamanca se esperan anuncios concretos sobre la ayuda para los países centroamericanos afectados por el huracán "Stan", avanzó Enrique Iglesias. La catástrofe centroamericana copa gran parte de la atención de los líderes iberoamericanos en su primera y única sesión de trabajo del día

Precisamente los presidentes de Guatemala, Oscar Berger, y El Salvador, Elías Saca, tuvieron que cancelar su participación en la cumbre por los graves estragos que causó "Stan" en sus países

"Esperamos el anuncio de algunos países sobre ese tema, particularmente de España, sobre la colaboración", manifestó Iglesias, aunque recordó que en este sentido ya hay muchos países que están enviando ayuda. También señaló que sólo después del encuentro se sabrá si se han acordado montos concretos de ayuda. Recordó además que en la Declaración Final de la cumbre hay un apartado sobre "desastres naturales", en el que se le pide a la SEGIB que organice de cara al futuro "algún mecanismo para coordinación de situaciones de emergencia entre países miembros", así como sobre los problemas de la reconstrucción.

Foros paralelos

Asimismo Enrique Iglesias elogió la importancia de estos dos foros paralelos a la Cumbre. El foro económico, que reunió a más de 100 empresarios, es el punto de partida de lo que será un consejo asesor del sector empresarial, con encuentros anuales de este tipo, para hacer acuerdos y fomentar inversiones, señaló Iglesias.

Los participantes pidieron a los jefes de Estado y de gobierno del bloque que creen un marco institucional que favorezca la inversión privada, al tiempo que defendieron la creación de empresas mixtas. Aunque en los últimos años se ha mantenido un crecimiento económico significativo, los empresarios consideraron que no es suficiente si no se crea un mecanismo que dé estabilidad a las compañías. Sólo así, señalaron, Iberoamérica será, además de "una historia y una lengua común", un "futuro económico y empresarial común".

Por su parte, en el I Encuentro Cívico se pidió a los mandatarios que adopten políticas que garanticen los derechos de los migrantes para evitar su explotación, también por parte de los intermediarios financieros en el caso de las remesas. Asimismo, reclamaron que se considere a los migrantes como un factor de desarrollo.

Esta es la segunda que se organiza en España desde la de Madrid en 1992. La próxima cita será en noviembre del 2006 en Montevideo, y Chile será el anfitrión de la cumbre del 2007.