1. Ir al contenido
  2. Ir al menú principal
  3. Ir a más sitios de DW

Au-Pairs: mejor preparación para evitar fracasos

3 de enero de 2011

No hay familia ni au pair perfectas. Las malas experiencias en torno a este programa hacen necesario elevar los estándares y mejorar gestión de las agencias para evitar malos ratos y aprovechar mejor esta experiencia.

https://p.dw.com/p/zt0v
Encuentro de agencias para traer au pairs a Alemania, en Perú.Imagen: APAAP

Quejas y reclamos van de lado a lado. En algunos casos, la aventura au pair ha sido frustrante para ambas partes, lo que deja un sabor amargo, pues en ella han puesto tiempo, dinero y grandes expectativas. Y además, hay niños de por medio.

Las acusaciones de algunas familias indican que la au pair tiene poca iniciativa, sólo le interesa el computador, tiene nula empatía con los niños, no habla ni comparte con nadie, no cumple con las tareas o es como tener otra hija más.... sólo da trabajo.

Au-Pair
Patricia Brunner, presidenta de la Au Pair Society, en Alemania.Imagen: Au-Pair Society

Por su parte, hay casos de au pairs que reclaman malos tratos, desde el no cumplimiento del pago o los días libres, hasta dar menos comida que al resto de la casa. “Cuando llegan por internet y sin agencia es un poco peligroso. A veces la familia no quiere respetar las reglas o no da tiempo para los cursos de alemán y llegan aquí a pedir ayuda”, cuenta Ute Maar, directora de Au Pair Alemania.

“Descubrí que la au pair estaba en mi computador navegando en sitios de búsqueda de marido”, cuenta Anya Schneider. La contrató vía internet sin recurrir a una agencia, para ahorrase el pago de la comisión. Tras ésta vinieron otras que tampoco cumplían con las expectativas y necesidades de la familia.

“Algunas au pair que vienen de países pobres piensan que les debemos algo y tenemos que dar más de lo que ellas entregan”, dice Anya. “Se quedan sentadas en la esquina esperando que las atiendan y creo que muchas buscan casarse para quedarse en Alemania”, agrega.

Pero no todo fueron malas experiencias. “Todo depende del tipo de persona que uno encuentre. Lo más importante es que esté interesada en los niños. Si no, tendrás más problemas que beneficios”, concluye.

“Puede pasar que algunas vienen con agendas ocultas, o cambian y no están realmente interesadas en ser au pair. Por otro lado, algunas familias tienen expectativas equivocadas acerca de lo que la joven puede hacer”, señala Patricia Brunner, de la Au Pair Society.


Confianza y compromiso


Distinta es la experiencia de Susanne Weil. Ha tenido ocho Au-Pairs, provenientes de distintos países y la última, colombiana. “Somos una familia multinacional y muy abierta. Nos gusta que los niños conozcan otras culturas”, cuenta. Para ella, no importa el país de origen, sino que la personalidad de la Au-Pair. Dice que es muy importante contratarla a través de una agencia, “con la que tienen la seguridad de que si tienen algún problema en la familia alguien las va a ayudar”.

Au-Pair
Cursos de preparación para la tarea de au pair, en Perú.Imagen: APAAP

Lo mismo recomiendan instituciones ligadas al tema. Patricia Brunner, de la Au-Pair Society advierte: “No hay ayuda ni control si lo hace por internet y además hay muchas estafas. Nadie controla si las familias cumplen con lo que prometen y viceversa, tampoco es muy seguro para la familia. Las jóvenes que vienen con una agencia cumplen con ciertos estándares”.

Maricarmen Romero, presidenta de la Asociación de Agencias Au-Pair de Perú, APAAP, complementa: “En muchos casos las participantes exponen sus vidas y nadie se hace responsable. Ambas partes tienen mucho que perder, pues la familia también se toma el riesgo de que el perfil de su Au-Pair no sea veraz y que ésta termine huyendo de la casa y quedándose de ilegal o, peor aún, no tratando bien a los niños”.

Por esto, la APAAP busca elevar la calidad de las participantes mediante un mejor proceso de selección, capacitación y monitoreo en su año en el extranjero. La Asociación Internacional de Agencias, IAPA, inició una campaña de calidad con talleres en países latinoamericanos. Allí exponen sus preocupaciones y metas: la necesidad de dar información clara y real de un programa que dura un año con retorno al país de origen, y exige Au-Pairs de calidad, comprometidas con sus familias anfitrionas y los niños.

“A las familias les recomendaría que sean más tolerantes y tengan mucha paciencia –dice Maricarmen Romero-. La mejor Au-Pair es aquella que es carismática y le gustan los niños, que está pendiente de sus necesidades, que está abierta a aprender las cosas al estilo de las familia, y le gusta compartir algo de su tiempo libre con ella”.

Autora: Victoria Dannemann

Editor: Enrique López